Assouline

Forte dei Marmi, la joya de la corona de la costa mediterránea de la Toscana, presume de playas bañadas por el sol y un esplendor costero inigualable. Su historia narra una transformación: de ser un pintoresco pueblo pesquero a convertirse en un glamuroso refugio para la jet-set. Sombrillas de colores pastel de los clubes de playa salpican las arenas prístinas, mientras los Alpes Apuanos ofrecen un majestuoso telón de fondo. Escultores de renombre como Miguel Ángel y Jeff Koons han encontrado inspiración en las cercanas Carrara y Pietrasanta. El evocador texto de Edoardo Nesi y la impresionante fotografía capturan el espíritu de este paraíso sin igual, convirtiéndolo en un destino ideal para unas vacaciones italianas atemporales.